
Si tengo que morir que sea en primavera
arropada de razones que me expliquen
porqué no morir entre tus brazos, si es la primavera.
Si... si tengo que morir que sea en primavera
prendida al hechizo de tus besos de colores
y bosques de segundos aromando a la paciencia.
Pero si tengo que morir de penas no resueltas
no olvides sembrar auroras en la recta
y deja al viento que me lleve con las flores.
Y si es que tengo que morir... y toca en primavera
que sean las lilas y las rosas las que recuerden
la torpeza de haberlo hecho en primavera.
CARMEN DEL BLANCO
1 comentario:
Bellísimo Carmen!
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